Con los años aprendo a escuchar, más que hablar,
intento aprender a reir con cautela, a mirar de frente
a absorver el dolor y a ocultar los desengaños,
pues a nadie le importa si te duele el alma o no.
Con los años aprendo, que es mejor la calidad,
pues las cantidades se nos agotan, en un devenir eterno,
aprendo de las palabras calladas, los ruidosos silencios
que no por ser mudos, dejan de ser elocuentes.
Con los años, aprendo a desprender de mi lo fatuo, lo vano
aferrandome solo a lo que tiene real valor,
pues las cosas sencillas, aquellas que no pagas,
son las que conservan su mayor significado en si mismas.
Con el tiempo aprendo a que no me importa lo que otros digan de mi,
si soy fea, bonita, inteligente, tonta, igual seré siempre yo,
con virtudes defectos, aciertos y errores.
Con el tiempo, he aprendido que soy un ente solo, que vino
a cumplir su historia personal, y solo yo seré capaz de vivirla.
Y con el tiempo he aprendido a ser mas franca, a decir te amo
con el corazón, cuerpo y alma.
Con el tiempo he aprendido a ser más yo, para poder amarte más
A TI.
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